02.12.2020
Ser Europeo siendo Mexicano (o al revés)
En memoire de Jean Jaime, mon chère beau-père.
Cuando tenía 18 años, el muro de
Berlín aún no caía. Fueron las elecciones en México en las que se cayó el
sistema. Bartlett era el tema. En el Excelsior, se publicaba una columna del
WSJ y recuerdo que la leía ávidamente. La bolsa tenía un auge espeluznante. Esas
columnas me hicieron querer estudiar economía. Se hablaba del cuarto poder. Ese
cuarto poder era el mercado de bonos del Tesoro. Si las tasas subían o bajaban
en ese mercado, el gobierno Americano estaba a salvo o no. Carlos Salinas (sí,
el innombrable) se convertía en presidente. Vaya memorias.
Al mismo tiempo, Margaret Thatcher
presionaba a los Europeos a la implementación del “mercado único” o mejor
dicho, mercado interno (Single Market). De ese tema, me comprometo a escribir a
detalle en la próxima o próximas entradas, ya que son temas no complicados pero
complejos. Después vino Maastrich y posteriormente la debacle de la libra en la
que George Soros hizo fortunas. Pero eso ya es historia.
A mí, como joven, me impactó. Tuve
el beneficio de poder comprender lo que venía, pero en particular, lo que
nuestros padres y abuelos construyeron. De cualquier forma, busqué ávidamente recuperar
mis derechos ciudadanos, y a los 20 años me convertí en Europeo. Recibí mi
nacionalidad Alemana, y conservé mi noción de Mexicano. Qué maravilla. Tener 20
y ser ciudadano del mundo. No tiene precio. Repentinamente me abrieron los ojos
hacia Europa occidental. Entonces, la apertura hacia Europa oriental no estaba
en la mira, cuando menos para el ciudadano de a pie.
Ya en los 90s, estudié economía
mientras se negociaba el TLC. Mis maestros de comercio internacional y de
teoría de juegos eran los negociadores. Sus lecciones fueron invaluables. Nos
terminaron explicando, no a detalle, pero explicando claramente la diferencia
entre los 2 proyectos. TLC de Norteamérica vs EU Single Market + Customs Union.
Nosotros los jóvenes (y la gran mayoría de la prensa especializada) los
confundíamos. Esta última frase tiene un trasfondo único. Increíblemente, casi
30 años después sigue siendo tema de discusión. Ya tocaremos el tema
Me tardé algún tiempo en
comprender que esa Europa que nuestros padres y abuelos construyeron, fue una
Europa para evitar lo que mis bisabuelos y tatarabuelos hicieron. La guerra. La
Unión Europea es el proyecto de paz más grande que la humanidad ha conocido.
Un día, decidí que al terminar mi
carrera universitaria buscaría continuar mi educación en Europa. No en US. En
Europa. Vaya, la decisión era evidente. Buscar educarse en una sociedad liberal,
abierta, tolerante, y con tendencia a la social democracia era como se dice un “no
brainer”. Terminé eligiendo UK. Cumplía con todos los requisitos excepto el ser
secular. En los 90´s de Tony Blair, “Cool Brittania” era un emblema llamativo
para un adulto joven de 27 años. Podría
educarme en la sociedad más liberal de Europa.
Así comenzó mi vida como Europeo.
Llegó el punto en el que me dí cuenta de que yo era aún más liberal que la
sociedad en la que me educaba. Me sentía en mi medio. Veía a lo lejos la
sociedad en la que había crecido como una añeja visión, pero también como una
cultura mía, muy mía a la que extrañaba.
Pasaron los años, y la cultura
liberal Europea de la que me enamoré comenzó a cambiar. Me tardé 10 años en
darme cuenta.
El 24 de Junio de 2016, a los 46
años, mi mundo se rompió. Esa mañana me salieron lágrimas. El mundo que soñé a
los 20 años se había roto. La sociedad liberal que admiraba y amaba se comenzó
a convertir en una sociedad protofascista. El sueño de una Europa unida, sin
guerras, integrada, se reventó. Fue quizá el día mas triste de mi vida. El país
que me adoptó, en el que eché raíces, en el que mis hijas nacieron, decidió
dejar de ser parte de ese sueño. Me rompió el corazón.
Pero, aún tengo esperanza. Ahora,
como Europeo-Mexicano (o quizá al revés), sigo pensando que la Unión Europea es
el proyecto más grande que la humanidad haya pensado. Es el proyecto pacifista
por excelencia. No por Nada Vladimir Putin lo quiere reventar.
Me da pena UK. Quizá, en el
futuro no muy lejano dejen de pensar en la victoria de la 2nda guerra (que por cierto no es suya, es de los Rusos), y comiencen
a pensar como Europeos. Pero eso, es pedirle "peras al olmo".
German Hitz
Economista ITAM, MBA LBS
@Herman_a_German
02.01.2020